UBA lanza campaña contra recortes presupuestarios: ‘Cuidemos lo que funciona’

Un video compartido por la universidad llama a la comunidad a unirse en la recolección de firmas para expresar su oposición a la medida adoptada por el gobierno de Javier Milei.


Durante la intensa discusión sobre el ajuste y recorte presupuestario a las universidades, la Universidad de Buenos Aires difundió un video reivindicativo en las redes sociales, junto con un llamado a la recolección de firmas para oponerse a la medida del Gobierno de Javier Milei.

El video, que comienza con una voz en off diciendo «acá pasaron un montón de cosas», muestra a un joven recorriendo las distintas facultades que componen la UBA. Mientras avanza por los pasillos del establecimiento vacío, la voz en off continúa: «Acá se recibió el médico que ayudó a curarle esa enfermedad a tu viejo y la veterinaria que salvó a tu mejor amigo. De acá salieron presidentes, empresarios, científicos, de acá salieron campeones del mundo».

Acompañando al cortometraje, se incluyó un enlace que redirige a un formulario con un mensaje breve y claro: «Contra el recorte presupuestario, cuidemos la UBA».

Esta campaña está dirigida al Gobierno y surge en medio de las críticas por el presupuesto asignado a las casas de estudio, el cual se mantiene igual que en 2023. Las universidades reclaman el impacto de la inflación, que durante el último año alcanzó el 276%.

Además del pedido de firmas, la UBA respaldó su crítica con varios tuits en los que detalla el financiamiento de otras casas de estudio en comparación con aquellas de similar calidad académica y tamaño.

Según estas publicaciones, la Universidad de Buenos Aires recibe 1.123 dólares por alumno al año, mientras que otras instituciones, como la Universidad Nacional Autónoma de México, recibe 7.968 dólares y la Universidad de San Pablo, 15.000 dólares.

En este contexto, se destaca que el recorte llevará a una reducción en la cantidad de clases y afectará la calidad académica, la seguridad y la investigación científica.

La UBA no es la única institución educativa que ha cuestionado el ajuste a las casas de estudio. La Matanza, Hurlingham, Tres de Febrero, Moreno y el Oeste también han alertado sobre una situación de emergencia y han comenzado a adaptar sus cursadas para hacer frente al ajuste.

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